POCHAS A LA NAVARRA

Hola a tod@s

Hoy toca un platazo de cuchara, muy senillo y rico: Pochas a la Navarra.

Como la temporada de las Pochas es muy corta (de julio a septiembre) las últimas que compre a finales de septiembre las congele con la intención de poder disfrutar una vez más de estos excelentes granos antes de que vuelvan en verano.

También se pueden comprar fuera de temporada en los supermercados en estado de congelación ó envasadas en conserva, pero yo soy de la opinión que estas desmerecen bastante de las frescas.

La “POCHA” es una variedad de alubia temprana, que se consume antes de su maduración y está considerada como verdura. Su sabor es fino y es menos harinoso que la alubia. El nombre le viene del color pálido (pocho) que tiene la vaina.

La forma que os propongo para cocinarlas no es nada complicada además como no necesitan remojo de víspera las podemos cocinar al momento. Lo mas importante es salarlas siempre después de cocidas y cocinarlas siempre a fuego suave. Como dice un dicho de Puente la reina, “la pocha no debe hervir, sino sonreír”.

Una forma sencilla de cocinarlas para disfrutarlas con todo su exquisito sabor.

INGREDIENTES (2 comensales)

  • 500 grs. de Pochas frescas desgranadas (sin desgranar 1K.)
  • 1 Pimiento verde mediano
  • 1 Tomate  maduro bien picado
  • 1 Cebolleta bien picada
  • 1 zanahoria pequeña bien picada
  • 3 dientes de Ajo bien picados
  • 2 cdas. de Aceite de Oliva Virgen Extra 
  • 2 cdats. de Pimiento choricero
  • Agua
  • Sal
  • Opcional: podemos acompañar con unas guindillas.

ELABORACIÓN

  1. En una cazuela con el aceite de oliva sofreímos a fuego lento el pimiento, la zanahoria, los dientes de ajo y la cebolla bien picados.
  2. Cuando tengamos la verdura tierna, incorporamos las pochas, el tomate y sofreímos todo junto durante unos minutos dando vueltas para que no se pegue nada.
  3. A continuación cubrimos con agua fría hasta que cubra 3 dedos por encima y dejamos cocer borboteando el agua pero sin que llegue a hervir fuertemente para evitar que se rompan las pochas. Cocinaremos lentamente durante 50-60 minutos. Las pochas tienen que estar tiernas pero no pasadas de cocción.
  4. A media cocción añadiremos el pimiento choricero y en vez de remover con una cuchara, movemos circularmente la cazuela para que se mezclen bien todos los ingredientes.
  5. Para finalizar unos minutos antes de terminar añadimos la sal rectificando hasta poner al punto deseado. Probamos y si está bien a la mesa, y a disfrutar de este platazo de cuchara.

Metéis la cuchara en el plato, las catáis y ya me lo contareis.

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